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Ir al planificadorLa Reserva Natural Especial del Chinyero está situada en la dorsal de Abeque, uno de los tres vértices de crecimiento de la isla y el más activo en la actualidad.
En ella han tenido lugar dos erupciones históricas en la isla: la del volcán de Garachico (1706) y la última vivida en Tenerife, la del Chinyero (1909).
En la erupción de Chinyero contrastan malpaíses, depósitos de picón y conos volcánicos con una variada vegetación que poco a poco ha ido colonizando un paisaje inicialmente inerte. Por lo tanto, se trata de un lugar con gran importancia para el estudio de la colonización animal y vegetal de las lavas recientes.
Este entorno permite entender los ecosistemas aerolianos donde, ante la falta de nutrientes en el suelo, las plantas e invertebrados que se instalan en él se sirven del aeroplancton arrastrado por el viento para sobrevivir.
En total cuenta con 14 conos volcánicos repartidos por la reserva que representan la mejor expresión del vulcanismo reciente de Tenerife. Conforma así un paraje de gran belleza y alto valor científico, que a su vez es el portador de una de las mayores tragedias de las islas, la destrucción de Garachico.
Con el fin de proteger las zonas más frágiles y representativas del espacio, el acceso a los conos volcánicos de Montaña Garachico, Montaña Chinyero y Montañas Negras está prohibido, así como el tránsito fuera de los senderos establecidos.
La reserva es un ejemplo excepcional de la colonización y sucesión vegetal en terrenos volcánicos recientes.
Al tener malpaíses, hábitats riparios, laurisilva y pinar, puedes encontrar en ella numerosas especies vegetales.
Existen 113 especies endémicas presentes, un 31% del total de las especies registradas, entre las que destacan el tajinaste gigante, el bejeque puntero de Chío, el bejequillo peludo de Tenerife, el pastel de risco, el bejequillo menudo, la magarza de cumbre, la amargosa, la chajorra de Teno, la malvarrisco, el saúco o incluso la violeta del Teide, que tiene algunos ejemplares dentro de la reserva.
La mayoría de los invertebrados residentes en este paraje son especies no voladoras y con baja movilidad. Su principal alimento son pequeños artrópodos transportados por el viento como integrantes del plancton aéreo. El estudio de estas dinámicas es uno de los motivos principales para la protección de la reserva.
Entre los reptiles puedes encontrar las dos subespecies del lagarto tizón.
Y gracias a la variedad de ecosistemas presentes también podrás observar aves como el herrerillo, el pinzón azul, el pinzón vulgar, el reyezuelo sencillo, el verderón común, el pico picapinos, el gavilán, la chocha perdiz y el búho chico.
2739,4 ha (1,2% de la isla).
Tajinaste gigante, bejeque puntero de Chío, bejequillo peludo de Tenerife, pastel de risco, bejequillo menudo, magarza de cumbre, amargosa, chajorra de Teno, malvarrisco, saúco, violeta del Teide, lagarto tizón, herrerillo, pinzón azul, pinzón vulgar, reyezuelo sencillo, verderón común, pico picapinos, gavilán, chocha perdiz, búho chico.
Hábitat rupícola, Hábitat de coladas lávicas recientes, Hábitat de pinar canario, Hábitat de laurisilva.
Para consultar los permisos de uso y normativa actualizada de este Espacio Natural Protegido, visita la web oficial del Gobierno de Canarias.
Estos son algunos de los puntos de interés que puedes encontrar a lo largo de este recorrido.
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